La atleta de la ciudad ganó los 3.000 metros con obstáculos con su hija Lina en el estadio. "Ella es mi verdadera medalla de oro", expresó.
Fue una jornada soñada e inesperada para Belén Casetta. Ganó la medalla de oro con récord panamericano incluido en los 3.000 metros con obstáculos, su prueba favorita, con su hija Lina, de cinco meses y medio, en el estadio Nacional de Chile, justo en el día del cumpleaños de su esposo, Flavio, también presente en este momento fantástico.
La marplatense completó la prueba con un tiempo de 9m39s47/100, nuevo récord del campeonato, al quebrar la marca de la canadiense Genenieve Lalonde (9m41s45/100) en Lima 2019.
“Es increíble. Me sentí muy bien. Fui especulando hasta el final y administrando energías. Obviamente que no soy la misma Belén que antes de ser mamá. Son otras energías disponibles, otro descanso, otro tipo de entrenamientos, dedicando tiempo a estar con la bebé”, destacó muy feliz en la zona mixta.
“Estoy muy feliz. Realmente no me esperaba el primer puesto. Sí esperaba estar ahí, en la conversación. Había visto los tiempos y con el registro que tenía estaba novena o décima entre las participantes. Y mucho menos me imaginaba que podía hacer el récord panamericano”, confesó.
Además, consultada sobre el magnífico sprint final que le permitió pasar de cuarta a primera en la última vuelta, explicó: “Tengo que ver el video porque no me acuerdo de nada, así que no podría decir cómo lo hice. Tenía un resto, porque como madres siempre tenemos un plus, una energía extra. No hay excusa para decir que no hay energía cuando te están esperando y te necesitan tanto”, dijo con relación a su hija, a quien llevaba en la panza cuando compitió en los Juegos Odesur de Asunción y ahora le vio coronarse a nivel continental. Aunque todavía no tenga noción alguna de lo que eso significa.
La canadiense Alycia Butterworth terminó segunda (9m40s86) y completó el podio la brasileña Tatiane Raquel Da Silva (9m41s29).
Casetta entrenó hasta sus 7 meses de embarazo y luego continuó haciéndolo pero en bicicleta fija. Y luego de un parto normal, en mayo pasado, volvió gradualmente a tomar ritmo y a principios de octubre ganó los 3.000 metros llanos en el Grand Prix Sudamericano de Mar del Plata. Estaba lista. Y ahora es campeona panamericana, aunque les diga a todos que su medalla de oro es otra. “Estoy súper contenta con esta victoria. Pero mi verdadera medalla de oro es mi hija”.